Es conocido que somos lo que comemos, no tanto que también somos lo que pensamos.
Para mejorar nuestras vidas, primero hay que mejorar nuestros pensamientos.
Igual que practicamos ejercicio físico para mejorar nuestra salud, también hay que hacerlo con la Mente.
Cada pensamiento, sea positivo o negativo, sea optimista o pesimista, deja huella en nosotros para bien o para mal. De ahí que muchas cosas, mejor ni pensarlas.
La Meditación puede ser una práctica de gran utilidad.
sábado, 5 de febrero de 2011
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